La “Revista Hispana para el Análisis
de Redes Sociales” de España dedicó un número a la forma de generar comunidad y sus contribuciones a descubrimientos
académicos de impacto
Alejandro Cárdenas
La revista especializada en
investigación académica española, que publica desde hacer más de
7 años, dedicó en su último número un especial con 12 diferentes
artículos académicos con el tema “Las
redes sociales en la ciencia”.
Parecería que el tema de la revista es sobre las nuevas
formas de relacionarse desde los usos de la tecnología, como el SMS o el ICQ y en su tiempo o espacios como Twitter, Facebook y MySpace,
pero como su nombre lo dice, va mucho más allá para evaluar, las redes egocéntricas en diversos grupos sociales,
fuera de la esfera de internet, pero también se puede aplicar a los fenómenos que suceden en línea.
Entre otros artículos de esa edición, destaca el texto la académica de la Universidad de Florida, Chris McCarty, llamado “La estructura en las redes personales”, donde se analiza la forma en que se clasificam este tipo de grupos y cómo algunos carecen de estructura y variabilidad.
Por ejemplo se habla de datos "que
permiten a los investigadores estudiar cosas tales como las
características de las redes de apoyo social (Wellman & Wortley,
1990), las variaciones en el apoyo social tras un desastre natural
(Beggs, Haines & Hurlbert, 1996), la influencia de las redes en
el comportamiento de llevar pistola entre los adolescentes negros
(Myers et al., 1997), la relación entre el uso de drogas
intravenosas y la transmisión del VIH (Neaigus et al., 1994), o el
efecto de las redes personales en el comportamiento de voto
(Nieuwbeerta & Flap, 2000"
Y se añade: “En contraste, los que estudian redes completas (sociocéntricas) están interesados en los patrones de relaciones entre encuestados que forman un grupo social definido. El grupo pueden ser los miembros de un club, una clase escolar o el comité ejecutivo de una empresa en el ranking Fortune 500. Los que estudian redes completas miden la fuerza del lazo entre todos los miembros del grupo, y con eso disponen de una matriz de proximidades que representa los patrones de relaciones.
"Aplican un conjunto de técnicas de análisis basadas en matrices, algunas de ellas exclusivas del análisis de redes sociales (tales como la centralidad y la densidad), y otras que son habitualmente usadas en la estadística multivariante (tales como el análisis de clusters y el escalamiento multi-dimensional). Los investigadores que siguen el enfoque de redes completas examinan temas tales como la formación del estado en la Italia del Renacimiento (Padgett & Ansell, 1993), la estructura de las redes corporativas japonesas (Gerlach, 1992), o la innovación empresarial (Raider, 1998)”.
“Entre los investigadores de redes sociales se asume con frecuencia que la aplicación de los análisis típicos de las redes completas no puede extenderse a las redes personales. Según parece, con algunas excepciones, no hay razones matemáticas o estadísticas que impidan la aplicación de las técnicas matriciales a los datos de redes personales. Hay, sin embargo, limitaciones conceptuales y logísticas”.
“Entre los investigadores de redes sociales se asume con frecuencia que la aplicación de los análisis típicos de las redes completas no puede extenderse a las redes personales. Según parece, con algunas excepciones, no hay razones matemáticas o estadísticas que impidan la aplicación de las técnicas matriciales a los datos de redes personales. Hay, sin embargo, limitaciones conceptuales y logísticas”.
Otro de los temas de la revista se
titula: Surgimiento de las prácticas científicas de colaboración en la ciencia mexicana con cobertura en los índices internacionales, realizado por Francisco Collazo Reyes, del Centro de
Investigación y de Estudios Avanzados, Departamento de Física,
de México.
En ese texto se presenta un estudio de
la producción científica mexicana publicada en la primera mitad
del siglo XX, que analiza redes bibliográficas y de redes sociales de
coautoría que toma en cuenta elementos historiográficos, sociales y
bibliométricos orientados a identificar y caracterizar la evolución
de sus prácticas científicas de 1930 a 1950.
Otros de los artículos interesantes de
la revista número 21 en su edición de diciembre del 2010 en España,
son:
Aplicación del análisis de redes al estudio de la investigación española de historia de la ciencia, por
Julia Osca-Lluch.